Pages

Wednesday, October 09, 2013

Reconciliación, una palabra que comienza a caminar con timidez en Miami

Reconciliación, una palabra que comienza a caminar con timidez en Miami
Rui Ferreira | Miami
Actualizado martes 08/10/2013 18:31 horas

La mayoría de los analistas coinciden en que no es una tarea fácil
reconciliar la sociedad cubana, dividida desde 1959 con el triunfo de la
Revolución Cubana. Durante el último medio siglo, ambas partes se
acusaron mutuamente de las peores desgracias. En Cuba siempre vieron al
exilio como una fuerza que quiere destruir el 'proceso revolucionario' y
tienen buenos ejemplos para sostenerlo: desde una invasión militar en
1961 hasta la voladura de un avión comercial en 1973, sin olvidar los
centenares de desembarcos en las costas y sabotajes económicos y hasta
los atentados con bombas del verano de 1997.

En Miami, la visión no es menos antagónica, pero los exiliados –tal como
en la isla– se miran a sí mismos más como víctimas que como atacantes.
Durante todos estos años, sus líderes políticos siempre han dicho que
tuvieron que exiliarse porque fueron empujados a ello por el rumbo
político que Cuba tomó cuando se alió con la difunta Unión Soviética, y
muchos de ellos justifican así los ataques a la isla. El diferendo entre
las dos orillas está claramente definido por la postura que cada uno
tiene sobre el Comunismo y, pese a la misma sangre, la palabra
'reconciliación' era, en lo mínimo, un tabú para no decir una 'mala
palabra'. El odio llegó a un punto en que durante unas tres décadas no
había comunicaciones. Familias enteras quedaron sin saber de sus seres
queridos.

Hasta ahora. En los últimos años el ambiente ha cambiando. Hay una mayor
comunicación familiar, el correo y el teléfono funcionan, Cuba y Estados
Unidos han bajado la retórica, las reformas avanzan lentamente en la
isla y en Miami se está asentando una nueva orneada de inmigrantes,
mucho más flexibles hacia Cuba y su sociedad. Pero también se están
muriendo los viejos exiliados, que todo este tiempo se mantuvieron
irreductibles en sus posturas anticomunistas, cerrando e impidiendo todo
tipo de diálogo y contacto.

El ejemplo alemán

Es así como, muy lentamente, la palabra 'reconciliación' se está
abriendo paso. El fin de semana pasado, un grupo de académicos y unas
150 personas se reunieron en una universidad del sur de Florida para
explorar el asunto, que fue abordado con cierta timidez pero partiendo
de la experiencia de la reunificación alemana, tras la caída del Muro de
Berlín en 1989.

La mayoría coincidió en que una reconciliación entre las dos orillas es
una tarea compleja que tiene beneficios y dificultades. Pero no es
imposible. "Esta es una comunidad completamente diferente" que en los
últimos tiempos cada día va superando sus distancias políticas, dijo
Marifeli Pérez-Stable, de la Universidad Internacional de Florida.

Pérez-Stable sabe de lo que habla, ella ha sido una pionera en los
contactos con el Gobierno cubano. En 1978 participó en una reunión entre
exiliados y el Gobierno, en la cual se logró la liberación de 3.600
presos políticos y se abrieron las comunicaciones entre las dos orillas.
Pero el asunto no fue más adelante porque hubo una resistencia muy dura
en Miami y La Habana no bajó la retórica política con la llegada de
Ronald Reagan a la Casa Blanca.

En la reunión salieron a relucir cuatro grandes vías que propician una
reconciliación, como el perdón y justicia hacia las víctimas del
autoritarismo, la participación de todos los sectores en la
reconstrucción económica, los valores democráticos y la restitución de
propiedades. Temas estos, que fueron ampliados por dos académicos de la
desaparecida República Democrática Alemana, que trabajan ahora en
universidades estadounidenses.

Arrepentimiento

Según Dieter Dettke, profesor del Centro de Estudios Alemanes y Europeos
de la Universidad de Georgetown, el verdadero acercamiento necesita del
perdón y arrepentimiento, pero no puede primar la venganza. "Es
importante que en una reconciliación haya un pecador que se arrepiente",
dijo el académico, recordando que durante la reunificación alemana se
llevaron al los tribunales 246 altos funcionarios del régimen, la mitad
fueron dejados en libertad, y también se implantó el perdón.

Uno de los participantes en la conversación vino directamente de Cuba.
Se trata del laico católico Dagoberto Valdés, editor de las revista
'Vitral' y 'Convivencia', para quien además de la justicia, la verdad y
el perdón para llegar a una reconciliación, hace falta también una
"educación en ética civil". Es que, "sin perdón, el comunismo gana".

Valdés, según el diario 'The Miami Herald', se manifestó disponible para
un diálogo con el Gobierno y sus funcionarios, pero dentro de un marco
legal apropiado y con todas las piezas y condiciones sobre la mesa. "Con
la verdad" enfatizó varias veces.

La posible participación de la Iglesia cubana, que goza de una buena
relación con el Gobierno cubano, no fue soslayada. Otro académico
alemán, Gunter Nooke, quien fuera disidente en la RDA y posteriormente
Comisionado de Derechos Humanos, recordó que durante el régimen anterior
en la llamada Alemania Democrática, las iglesias fueron centros de
refugio para los opositores.

"Tienen el deber de brindar un techo a los opositores", de crear
'sociedades nicho' donde los disidentes se reúnen sin presiones o
molestias, dijo. Otro aspecto abordado, fue el de la restitución de
propiedades, que muchos exiliados reclaman tras ser confiscadas después
de 1959. Para esto, los alemanes tienen una respuesta: calma. "Eso es
parte de la necesidad de justicia poscomunista, pero son más importantes
las soluciones humanitarias a los problemas de propiedad y otros asuntos
críticos, que las soluciones legales o políticas", dijo Dettke.

En Miami, hay mucha gente que todavía aspira a recuperar sus
propiedades. Aunque el tema ya fue más 'popular' que ahora, todavía es
recordado con nostalgia en las emisoras de radio, reducto de los que se
oponen a una 'reconciliación' que es vista como una 'rendición ante el
comunismo. La reunión de este fin de semana fue la primera, no está
marcada otra. De momento.

Source: "Reconciliación, una palabra que comienza a caminar con timidez
en Miami | Estados Unidos | elmundo.es" -
http://www.elmundo.es/america/2013/10/09/estados_unidos/1381270682.html

No comments: